Voy a comerme la carnada.
Nunca hablé de méritos, perseguido de mierda. El hecho de que tu cerebro interprete la simple enunciación de mi postura personal como una declaración oficial de méritos demuestra que en el fondo mis ideas te parecen perfectamente legítimas y válidas.
El OP preguntando, bobo.
Teniendo en cuenta que dos líneas más abajo afirmo que los privilegios me parecen cualquiera, ni me voy a gastar en contradecirte. Tu hombre de paja me lo paso por el quinto forro de las bolas.
Porque las cuotas por género no me dejan vivir a mí: soy programador, y si el día de mañana milagrosamente las cuotas por género empezaran a tener aceptación, estaría en desventaja competitiva en el mercado laboral.
¿Te das cuenta de que en tu afán por ametrallar pelotudeces retóricas estás poniendo sobre la mesa cuestiones indignas de un jardín de infantes?
Todos los trastornos físicos y mentales forman parte de la identidad de una persona: "rengo", "mudo", "puto" o "esquizofrénico". No se trata de si son etiquetas válidas o inválidas. No le podés asignar un grado de validez a una palabra que describe objetivamente las características de alguien. Ser rengo no te hace ni mejor ni peor persona que tener las dos gambas sanas. Comértela, tampoco.
Desde un punto de vista legal, un enfermo tiene los mismos derechos que un sano. Toda legislación que garantice los derechos de la gente forma parte del camino al progreso.
Las estadísticas sanitarias muestran que comérsela es un factor enorme de riesgo suicida. Si a vos las estadísticas te parecen un meme es porque sos un burro recién bajado del altiplano y no servís ni para discutir el partido del domingo. Informate.
Ah, veo que sos de esos pelotudos que tienen miedo de contagiarse lo puto.
Si ver dos tipos besándose te llena el culo de preguntas, te tengo malas noticias.
